De la niñez a la adolescencia.

Sin duda, es para los hijos una etapa difícil; pasar de la niñez a la adolescencia es todo un duelo, emociones encontradas, ganas de crecer y de ser cada vez más independientes. Pero no solo para el nuevo adolescente es una constante batalla, ya que para los padres poder entender a sus hijos es cada vez más complicado.

Hace días platicaba yo con una señora, ella tiene al rededor de 34 años y su primera hija está entrando a la pubertad. Me comentaba que pocos meses atrás todavía había una comunicación amplia entre ellas, su hija le platicaba todo lo que hacía y deseaba hacer pero, poco a poco eso se fue perdiendo. Sus pláticas se volvieron más esporádicas y poco sustanciosas. Me dijo también que la ve más madura, estudiosa y centrada, y que más que preocuparse por el comportamiento de su hija, se preocupa por no saber como acercarse a ella, ni como tratarla.

Son muchos los padres que se encuentran en esta situación o alguna parecida, por lo cual se les recomienda que, desde una etapa más temprana ustedes se vayan anticipando a ésto y hablen con sus hijos, así cuando ellos hayan llegado a la adolescencia la confianza sea más amplia. Por supuesto, no digo que será pan comido andar por éste camino, pero en base a la COMUNICACIÓN será mucho más sencillo el entendimiento entre ustedes: PADRES e HIJOS.